El fiscal general de Michoacán, Carlos Torres Piña, rechazó las acusaciones de abuso hechas por Jorge Armando “N”, conocido como El Licenciado, y aseguró que se tratan de “mentiras”.
Durante una conferencia de prensa, Torres Piña afirmó que la detención del imputado se llevó a cabo de forma legal y en flagrancia, ya que portaba un arma de fuego, llevaba droga y además intentó ofrecer 10 mil dólares a los agentes para evitar su arresto.
El fiscal añadió que, durante su traslado al penal de máxima seguridad de El Altiplano, el detenido firmó un documento donde confirmó que no fue golpeado ni torturado.

Esto contrasta con lo que declaró El Licenciado durante la audiencia del miércoles. Ahí aseguró haber sido amenazado, golpeado y torturado por elementos encapuchados. También afirmó que no tuvo contacto con su familia ni con su abogado, pese a que un actuario promovió un amparo para garantizarle comunicación.
Según su versión, lo llevaron a una sala de la Fiscalía estatal, donde fue grabado y revisado en varias ocasiones. Dijo que pidió comunicarse con un familiar, pero se lo negaron. Incluso, aseguró que le dijeron que su esposa estaba en otra sala y que, si no cooperaba, “la iban a matar”.
Relató que una de las personas presentes le advirtió que “lo iban a chingar a como diera lugar”. Posteriormente, fue trasladado bajo estas condiciones a El Altiplano, donde finalmente, el 21 de noviembre a las 15:40 horas, logró establecer comunicación con un familiar.
