La caseta de la carretera Cuauhtémoc–Chihuahua amaneció nuevamente bajo control de los campesinos, quienes llevan más de 24 horas plantados en el lugar sin intención de retirarse. La protesta estalló ante lo que califican como un “abandono total” por parte de las autoridades, mientras miles de automovilistas continúan cruzando sin pagar un solo peso.

En medio del bloqueo, los productores entregan bolsas de frijol de cinco kilos a cambio de la cuota de peaje, una acción que se ha vuelto el símbolo del enojo campesino ante el incumplimiento de acuerdos oficiales. Los manifestantes denuncian que más de 80 mil toneladas de frijol están varadas, sin comprador y sin respuesta del Gobierno.
El líder del movimiento, Yurem Ortiz, advirtió que la caseta seguirá tomada el tiempo que sea necesario, hasta que las autoridades “dejen de ignorar” a los agricultores. La tensión crece en la región, mientras el flujo carretero permanece bajo el control total de los inconformes.
