Kristin Cabot, quien se desempeñó como jefa de recursos humanos en la empresa Astronomer, rompió el silencio sobre la relación que sostuvo con su entonces superior, Andy Byron, luego de que ambos fueran exhibidos por la “kiss cam” durante un concierto de Coldplay en Boston.
En una entrevista concedida a The New York Times, Cabot explicó que esa noche consumieron bebidas alcohólicas y que, conforme avanzó el espectáculo, comenzaron a comportarse de manera afectuosa. No obstante, recalcó que antes de ese momento nunca había existido contacto físico entre ellos.
La exdirectiva reconoció que actuó de forma equivocada al dejarse llevar por el ambiente del concierto y admitió que su conducta fue inapropiada, aunque aseguró que el episodio no fue más allá de ese instante. También señaló que la situación tuvo un impacto severo en su vida personal y laboral, lo que finalmente la llevó a presentar su renuncia a la compañía de inteligencia artificial.
Cabot, de 53 años, afirmó que asumió las consecuencias de sus actos, pero lamentó que ella y su familia fueran blanco de amenazas. Indicó que desea que sus hijos comprendan que los errores pueden ocurrir, aunque nunca deberían derivar en violencia o intimidación.

Sobre el origen de su cercanía con Byron, relató que se conocieron durante su proceso de contratación en el verano de 2024 y que, con el tiempo, desarrollaron una conexión emocional al coincidir en situaciones personales similares, como procesos de separación. Aunque aceptó que llegó a sentir algo más por él, sostuvo que siempre tuvo presentes los límites de la relación laboral.
Respecto al concierto de Coldplay, señaló que lo invitó cuando ya estaba enamorada, pero aclaró que no se trató de una cita formal, sino de una salida grupal con amigos. Sin embargo, el momento en que fueron captados en la pantalla gigante del evento los colocó en el centro de la polémica, luego de que se mostraran abrazados y reaccionaran con sorpresa al verse exhibidos, lo que incluso generó comentarios desde el escenario por parte de Chris Martin.
Cabot confesó que se sintió avergonzada y expuesta, sobre todo por el cargo que ocupaba dentro de la empresa y la posición de Byron como director ejecutivo. Tras el incidente, ambos informaron a la junta directiva de Astronomer, que inició una investigación interna y los envió a licencia administrativa.
Ella presentó su renuncia al día siguiente, mientras que Byron dejó su puesto días después. Aunque a Cabot se le ofreció regresar a la empresa, decidió no hacerlo debido a la presión mediática y a las amenazas recibidas por su familia.
Posteriormente, Andrew Cabot, aún esposo de Kristin y director ejecutivo de Privateer Rum, confirmó que la pareja ya se encontraba separada de forma privada y en buenos términos antes del concierto. La exdirectiva formalizó la solicitud de divorcio a mediados de agosto ante un tribunal de New Hampshire.
En cuanto a Andy Byron, se desconoce la situación actual de su matrimonio con Megan Kerrigan, quien previamente eliminó su apellido de casada de sus redes sociales antes de cerrar su cuenta. Cabot indicó que mantuvo contacto con Byron tras el escándalo, aunque ambos optaron por cortar comunicación para poder seguir adelante.
