El horror volvió a sacudir al suroriente de Chihuahua: una mujer fue ejecutada de un disparo en la cabeza y abandonada como si fuera basura en un dique de la colonia Parajes del Sur. El cuerpo, hallado por un vecino, mostraba signos de violencia y junto a él reposaban su bolsa y pertenencias, testigos mudos de una muerte fría y calculada.

En la escena del crimen, los agentes localizaron un casquillo calibre 9 milímetros, evidencia del disparo certero que le arrebató la vida a la víctima, de unos 40 años. Ni el amanecer trajo calma: las patrullas y sirenas rompieron el silencio mientras los vecinos miraban con miedo desde lejos.
Este asesinato eleva la cifra a 57 homicidios en lo que va del mes, una estadística que pinta de rojo el calendario de Chihuahua. La ciudad sigue amaneciendo entre cintas amarillas y cuerpos abandonados, mientras las autoridades buscan respuestas que parecen llegar siempre tarde.
