Un joven de 24 años terminó en el hospital luego de que su teléfono celular estallara como una pequeña bomba dentro de la bolsa trasera de su pantalón, provocándole dolorosas quemaduras de segundo grado en los glúteos, parte de las piernas y la mano derecha. El estallido sorprendió incluso a los policías estatales que se encontraban en un evento cercano y que escucharon el grito desesperado del afectado.
De acuerdo con los agentes, el joven llegó corriendo y pidiendo auxilio mientras el humo salía de su ropa, escena que rápidamente llamó la atención de quienes se encontraban en el área. Los oficiales intentaron estabilizarlo y evitar que el fuego le siguiera causando daños, mientras el afectado relataba que el celular, aparentemente sin previo aviso, simplemente explotó a unos centímetros de su cuerpo.

Minutos después, paramédicos del Gobierno del Estado arribaron al lugar y trasladaron al lesionado al Hospital General, donde recibe atención especializada. Las causas del estallido aún no han sido esclarecidas, pero las autoridades advierten que este tipo de incidentes podrían repetirse si los usuarios continúan portando sus teléfonos en zonas de calor o presión.
