El caso que estremeció a Uruapan dio un giro explosivo luego de que un juez ordenara encerrar a los siete escoltas del exalcalde Carlos Manzo y al temido “Licenciado”, señalado como el cerebro detrás del asesinato ocurrido en pleno “Festival de las Velas”. La audiencia, que se extendió por más de ocho horas, dejó al descubierto la presunta red criminal que habría puesto precio a la vida del funcionario: dos millones de pesos para silenciarlo por estorbar en los planes del crimen organizado.

De acuerdo con las revelaciones de la Fiscalía, el “Licenciado” dirigía una célula al servicio del Cártel Jalisco Nueva Generación y habría ordenado el ataque ejecutado por un adolescente sicario. Mientras tanto, los escoltas —quienes debían proteger al alcalde— ahora son acusados de haberse cruzado de brazos y permitir el crimen. Uno de ellos incluso está bajo la sospecha de haber rematado al menor implicado cuando ya estaba sometido, lo que ha encendido aún más el escándalo.

Pese a los intentos de la defensa por alegar detenciones ilegales, el juez no cedió y mandó a los ocho detenidos a prisión preventiva: los escoltas al Cereso David Franco Rodríguez y el “Licenciado” directo al Altiplano, el penal de máxima seguridad. La trama se complica aún más al recordarse que dos presuntos colaboradores del ataque fueron encontrados muertos días después, alimentando la teoría de una limpieza interna para borrar pistas. El próximo 26 de noviembre continuará la audiencia, en un caso que parece lejos de terminar.
