El ambiente político volvió a incendiarse luego de que el diputado federal Alfonso Ramírez Cuéllar lanzara explosivas declaraciones que sacudieron a todo Chihuahua. En entrevista, el ex dirigente de Morena desató la polémica al afirmar que es “una vergüenza” que integrantes de la familia LeBarón hayan ingresado al partido, acusándolos —sin reservas— de ser “depredadores del agua” y señalando que operan pozos ilegales. Sus palabras, cargadas de indignación, encendieron de inmediato el debate público.

Ramírez Cuéllar, visiblemente molesto, no solo reiteró que los LeBarón “siempre se han robado el agua”, sino que también acusó que durante años han “traficado” con el vital líquido. El legislador aseguró que todo Chihuahua conoce la supuesta conducta de este grupo, y criticó duramente que ahora formen parte de las filas de Morena, calificando su ingreso como un acto “vergonzoso” que nadie ha logrado explicar.
Mientras las declaraciones del diputado corren como pólvora encendida, el partido enfrenta una nueva tormenta interna. Las acusaciones —tan fuertes como polémicas— han provocado reacciones inmediatas en redes sociales, donde el tema se volvió tendencia. Lo único seguro por ahora es que las palabras del legislador han reavivado tensiones históricas en la región y puesto bajo los reflectores, una vez más, a los LeBarón.
