Un impresionante despliegue de fuerzas federales tomó por completo la capital este martes, luego de que entre nueve y once detenidos —relacionados con el violento enfrentamiento ocurrido en El Pueblito, Aldama— fueran trasladados bajo un operativo blindado digno de película. Decenas de unidades de la Guardia Nacional, Policía Estatal, AEI y Ejército escoltaron a los capturados hasta las instalaciones de la Fiscalía de Distrito Zona Centro, convertidas en un verdadero búnker improvisado.

La llegada del convoy desató un cerco total alrededor del edificio ubicado en Teófilo Borunda y calle 25ª, donde la circulación vehicular quedó anulada y el paso peatonal reducido al mínimo. Patrullas atravesadas, vallas humanas y oficiales fuertemente armados mantienen un control absoluto mientras los detenidos son ingresados en medio de un hermetismo que solo ha alimentado la tensión.

Al mismo tiempo, otra parte del operativo se concentra en el Hospital Central, donde permanece bajo estricta custodia uno de los lesionados del enfrentamiento, señalado de ser uno de los principales objetivos del grupo rival. Su estado e identidad siguen sin confirmarse oficialmente, lo que ha desatado versiones encontradas mientras las autoridades continúan investigando los violentos hechos registrados en El Pueblito.
