El caos volvió a apoderarse de las carreteras y fronteras de la región desde las primeras horas de la mañana, cuando una ola de bloqueos desató un verdadero infierno vial. A las 11 en punto, miles de conductores quedaron atrapados en largas filas mientras manifestantes tomaban casetas, vías ferroviarias y accesos internacionales sin intención de retirarse.
En la caseta de Saucillo, agricultores y ganaderos hicieron su propia “ley”, dejando pasar a todos sin pagar y provocando un descontrol total en los carriles, pese a la apertura improvisada de más espacios para evitar que el tráfico colapsara por completo. Peor aún, en la Estación Consuelo, el ferrocarril quedó paralizado por un bloqueo que frenó el movimiento de trenes y mercancías. Y como si fuera poco, los puentes fronterizos Santa Teresa, Guadalupe-Tornillo, Zaragoza y Puente Libre también amanecieron sitiados, generando tensión en la frontera pese a que el cruce sigue abierto bajo advertencia constante.

Autoridades pidieron calma, aunque para miles de automovilistas la situación ya es una pesadilla. Entre incertidumbre, filas interminables y nulo avance, el llamado es a evitar la zona o prepararse para una jornada marcada por el desorden y la protesta.
