El alcalde de Delicias, Jesús Valenciano, emitió uno de sus posicionamientos más fuertes al acusar a legisladores federales y funcionarios de romper los acuerdos establecidos con productores durante la discusión de la nueva Ley de Aguas Nacionales. Señaló directamente a Ricardo Monreal, a la secretaria de Gobernación Rosa Icela Rodríguez, al subsecretario César Yáñez y a directivos de Conagua, a quienes acusó de “echarse para atrás” en los compromisos pactados en mesas de trabajo. “La mesa se rompió por completo”, afirmó.

Valenciano advirtió que la inconformidad del sector agrícola ya generó una movilización nacional con más de 200 tractores rodeando San Lázaro, bloqueos en puentes internacionales de Ciudad Juárez y protestas en vías del tren y carreteras en al menos seis estados. Aseguró que la reforma criminaliza al pequeño productor con multas elevadas y sanciones penales por usos básicos del agua, mientras Conagua mantiene 27 mil trámites atorados desde hace más de una década. También denunció que en el Distrito de Riego 05 hay más de 50 mil hectáreas con irregularidades que no han sido atendidas, así como tomas clandestinas y pivotes ilegales que —dijo— la federación ha ignorado.

El alcalde alertó que el impacto económico para la región centro-sur sería “devastador”, pues cerca del 70% de la actividad depende del campo, afectando desde gasolineras y comercios hasta proveedores de servicios y publicidad. Sobre una eventual respuesta desde la conferencia matutina, aseguró estar dispuesto a enfrentar críticas si eso contribuye a resolver la crisis. Mientras tanto, el panorama sigue tenso y los productores advierten que, si es necesario, trasladarán su protesta al Zócalo capitalino en los próximos días.
