Claudio Neves, un hombre vinculado con la muerte de dos personas y lesiones a varias más en la Universidad Brown, fue hallado sin vida en un almacén de Nueva Hampshire, informó la Policía estatal.
El sospechoso, de nacionalidad portuguesa, fue localizado en la bodega acompañado de una cartera y dos armas de fuego, tras ser rastreado desde una agencia de alquiler de autos en Massachusetts. Tras el hallazgo, el alcalde de Providence, Brett Smiley, declaró que los vecinos podrían “respirar un poco más tranquilos”.
El tiroteo en la Universidad Brown dejó un saldo de dos muertos y nueve heridos. Las víctimas fueron identificadas como Ella Cook, vicepresidenta de la asociación republicana de la universidad, y Mukhammad Aziz Umurzokov, estudiante originario de Uzbekistán que aspiraba a ser neurocirujano. El agresor disparó más de 40 rondas con una pistola de 9 mm, según las autoridades.
El incidente cobró relevancia nacional cuando surgió una posible conexión con un ataque ocurrido dos días después cerca de Boston, en el que resultó asesinado el profesor del MIT Nuno F.G. Loureiro, de 47 años, quien enseñaba en el Departamento de Ciencia e Ingeniería Nuclear desde 2016.
Como medida de seguridad, la Universidad Brown canceló clases, exámenes y actividades académicas para el resto del semestre, ofreciendo apoyo a los estudiantes que permanecieran en el campus. El rector Francis Doyle enfatizó la necesidad de brindar cuidado y acompañamiento a la comunidad ante la situación.
Tras el tiroteo, se incrementó la presencia policial en Providence y varios comercios locales cerraron en señal de duelo. Inicialmente, un hombre fue detenido en relación con los hechos, pero luego fue liberado. La universidad enfrenta cuestionamientos sobre la seguridad, pues se reportó que sus mil 200 cámaras de vigilancia no estaban conectadas al sistema policial.
La policía continúa investigando y analiza posibles vínculos entre el tiroteo en Brown y el asesinato del profesor en el MIT, además de mantener a una persona de interés bajo observación.
