El Instituto Nacional Electoral encendió la mecha de un cambio que sacudirá la política municipal en Chihuahua: los regidores dejarán de llegar al cargo “en paquete” y ahora tendrán que ganarse el puesto voto por voto. El organismo electoral ya puso en marcha el rediseño del mapa político del estado, con el que cada municipio será dividido en demarcaciones para elegir directamente a sus representantes.
Este movimiento sepulta el viejo esquema de planillas que acompañaban al candidato a alcalde y obliga a los aspirantes a salir a las calles de su distrito si quieren sobrevivir políticamente. Aunque aún faltan ajustes legales a nivel local, el INE decidió acelerar el proceso y comenzar desde ahora la reconfiguración territorial, bajo el argumento de que el tiempo apremia y el cambio es inevitable.

El nuevo modelo también abre un frente sensible: la consulta obligatoria a pueblos indígenas y afromexicanos, así como la participación de partidos políticos que buscarán influir en el trazo de los distritos. Para vigilar el proceso, el INE creó un comité especial que evaluará cada escenario, en lo que ya se perfila como una batalla silenciosa por el control político de los municipios rumbo a 2027.
