El ruido del metal retumbó en plena tarde sobre la avenida Río San Pedro, cuando una camioneta Honda SUV terminó incrustada en la parte trasera de una Toyota Avanza, justo frente a la Plaza de la Madre. El estruendo paralizó a conductores y peatones, quienes voltearon alarmados pensando que se trataba de un accidente grave.

Aunque el choque no dejó heridos, las imágenes del percance rápidamente circularon entre curiosos que se aglomeraron para tomar fotos y videos. El caos vehicular no se hizo esperar: claxonazos, gritos y confusión dominaron la escena mientras los oficiales de Vialidad intentaban ordenar el tráfico en una de las zonas más transitadas de la ciudad.

Tras varios minutos de tensión y con el sol cayendo sobre los vehículos dañados, los agentes reacomodaron las unidades y levantaron el reporte correspondiente. La causa del choque aún se investiga, pero el percance dejó una clara lección: un descuido basta para desatar el caos en las calles de Chihuahua.
