El empresario Carlos Andrade Andrade, pionero de las reconocidas Paleterías Michoacanas, perdió la vida la noche del lunes tras sufrir un infarto fulminante, cerca de las 10:00 p.m.
Durante los últimos meses, vecinos y clientes habían notado la ausencia del comerciante, pues su tradicional local en la calle Tercera Norte permanecía cerrado. La noticia de su fallecimiento conmocionó a quienes lo conocieron por su amabilidad y su incansable labor en el comercio local.

Originario de Tocumbo, Michoacán, Carlos llegó a Delicias en los años 80, donde impulsó con gran éxito la venta de helados y paletas, modernizando su negocio hasta convertirlo en una marca muy querida. En los años 90 amplió su presencia hacia Chihuahua capital y Ciudad Juárez, ganándose el respeto y cariño de la comunidad.
Además de su faceta empresarial, fue reconocido por su espíritu solidario: participó como voluntario en la Cruz Roja y formó parte de cámaras de comercio locales. Casado con una deliciense, con quien tuvo dos hijos, Carlos Andrade deja una huella imborrable de trabajo, humildad y generosidad. Sus restos son velados en Mausoleos Capillas de Fátima. Descanse en paz.
